Contrariamente a lo que dicen, esta flor tropical es muy rústica y resistente. Basta con darle algo de luz y un poco de humedad. El nombre científico viene de la palabra griega Orchis, que quiere decir testículos y hace referencia a la forma de sus tubérculos. Tiene más de 35.000 especies y se caracterizan por sus espectaculares y exóticas flores.
Ubicación
Coloca las orquídeas en el sitio más luminoso de la casa. Cerca de la ventana, por ejemplo, pero que no le de el sol directo, en su hábitat natural, la selva tropical, hay mucha luz pero los rayos de sol no las tocan, ya que los frondosos árboles no dejan.
Riego
El riego es muy importante en esta planta. Estas plantas crecen sobre los árboles u otras plantas, obteniendo así, la humedad del aire y el agua de lluvia que se escurre por sus ramas y raíces. Eso quiere decir que las raíces nunca están sumergidas en agua. La forma de riego es muy distinta a las demás plantas. No se puede decir cada cuanto se debe de regar, pues depende de muchos factores como el ambiente, el tamaño de la maceta o el tamaño de la planta. Lo mejor es observar las hojas y las raíces, ellas te indicarán cuando hay que regarlas. Una forma de riego es echar un vaso de agua a la maceta y recoger el agua sobrante y volver a depositarla en la maceta. Seguir realizando el proceso, hasta que la planta no admita más agua.
El abono
El abonos aporta las vitaminas necesarias ya que al vivir en macetas, no pueden conseguir estos nutrientes. Este abono debe ser específico. Habla con tu florista, para saber que abono es el ideal para tu orquídea.
Problemas y enfermedades
Raíces blanquecinas: Falta agua.
Hojas verdes oscuras tirando a marrón: Exceso de luz. Puede que hasta esté quemando las hojas de la planta.
Puntos en las hojas o flores, cambio de color de las hojas, en tonos amarillos: Es un hongo. Debido al exceso de humedad y a la retención de agua. Consultar a la floristería, ya que las orquídeas son muy sensible a los productos químicos.
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